Buenas sensaciones que dejaron a Dinamarca en su puerta a punto de la Eurocopa. En el duelo amistoso ante una Suecia que no jugó absolutamente nada, la capitanía de Eriksen fue superior en cada partido y ocasión y acabó levantando al equipo con una diablura del propio jugador del Manchester United.
Pautas
Ronnow; Kristensen, Andersen (Zanka, 46′), Vestergaard; Bah (Kristiansen, 61′), Hojbjerg (Delaney, 61′), Norgaard (Hjulmand, 61′), Maehle; Eriksen; Hojlund (Poulsen, 79′) y Vento (Dolberg, 86′). |
Olsen; Krafth, Hien, Lindelöf (Ekdal, 46′) (Starfelt, 54′); Eliasson (Holm, 86′), Jonsson Saletros, Cajuste, Elanga; Kulusevski, Olsson (Larsson, 46′); Isak (Nilsson, 69′). |
Lo cocinó y lo puso en marcha. Sacó en definitiva una falta, si hizo hueco en el frontal y lo metí donde Olsen no podía estirarlo. Primero, Hojbjerg se había unido al Dinamarca, pero Isak, sólo unos minutos después, había librado el duelo entre un balón que cayó muerto en el área.
El duelo no es para todos. Siendo amigables, los dos familiares se olvidaron de proteger un poco su zona y decidieron dar otro espectáculo. Tanto es así que en el primer minuto del partido de Hojbjerg ya se había sumado al Dinamarca con un saco de arena. En términos de estrategia, la selección danesa demostró ser muy poderosa durante todo el partido. El 1-0, eso sí, duró poco.
Excepto Eriksen
Ocho minutos después, Isak recibió un balón muerto dentro del área entre el disparo de Cajuste y lo aprovechó para mirar con la pierna menos buena. Aparte de eso, hay más monopolio de Dinamarca que buen juego de Suecia. Sí, los suecos pueden anotar algo. Sin embargo, el dominio y las ocasiones trajeron a la selección danesa, que acabó llevándose la jugada al agua con la genialidad de Eriksen.