Una mujer de 37 años, Tahira Montero, permanecerá en prisión domiciliaria tras ser acusada de simulación de hechos punibles y falsificación de documento público. Montero, arquitecta de profesión, inventó un embarazo para engañar a Duvier Alexander Morales, a quien hizo creer que era el padre de su supuesto bebé.
El caso
La acusada utilizó programas de edición de imágenes para incluirse en fotografías de habitaciones de hospital, simulando así un embarazo. El juez de Chiriquí, Carlos Fajardo, decidió mantener el arresto domiciliario de Montero al considerar que la medida cautelar de informes periódicos solicitada por la defensa no sería suficiente para garantizar los fines del proceso.
El engaño
El 14 de diciembre, Montero le entregó a Duvier una muñeca dentro de un falso ataúd, alegando que era su hija “recién nacida” Ducdielys Milagros Morales Montero, quien supuestamente había muerto tres días después de nacer en el Hospital Materno Infantil Santo Tomás. La muñeca estaba vestida con ropa de bebé, incluidos zapatos, una diadema y bolitas de algodón en la nariz, pero todo era una farsa.
Montero había tomado fotografías de habitaciones de hospitales y se había incluido en ellas utilizando programas de edición, creando así la ilusión de un embarazo y un parto que nunca ocurrió.
